lunes, 10 de mayo de 2010

Lujosos vehículos exonerados a legisladores cuestan al fisco más de mil millones de pesos

SANTO DOMINGO, República Dominicana.-¿Quiénes importan los más caros vehículos, cada cuanto les toca una exoneración, y como ha cambiado a ley que los libera de dichos impuestos desde 1966?.

Más de mil millones de pesos en ocho años. Se trata de la cifra que el fisco dejó de percibir por las exoneraciones a vehículos importados por legisladores, monto que ha dejado a muchos atónitos.

El estudio fue realizado por Participación Ciudadana, quien dio a conocer las importaciones de los carros durante los últimos dos años.

Aún así, obtuvieron los datos de los últimos ocho del Ministerio de Haciendo, o sea, los periodos legislativos, desde el 2002 hasta la fecha será desglosado por El Informe, la ley y como han cambiado los limites a través de los años.

Llenos de lujo, potencia y prestigio, de las marcas más reconocidas del mercado vehicular, arriban al territorio dominicano de la mano de senadores y diputados.

Y es que cada dos años los legisladores tienen el privilegio de traer al país “libre del pago impuesto” cualquier vehículo de motor, esto sin importar su costo, amparados en la ley 56 del 1996.

La publicación del estudio realizado por Participación Ciudadana ha dejado un mal sabor de boca en la sociedad, no sólo porque en los últimos ocho años el sacrificio fiscal por estas exoneraciones sobrepasó los mil millones de pesos, también ha dejado ronchas la opulencia con que actúan algunos legisladores, al momento de importar un vehiculo libre de impuesto.

De los automóviles más costosos en la lista aparece la marca Bentley Continental, dos de estos a nombre del ex senador por Samaná, Ramiro Espino Fermín, el primero llegó al país en el 2004, su valor sin salir de Aduanas sobrepasa los 15 millones de pesos, al ser exonerado el fisco dejó de recibir unos ocho millones 324 mil pesos.

Dos años después llega el segundo Beltley propiedad de Espino Fermín, con un costo aproximado de 9 millones de pesos, con éste el estado dejó de percibir tres millones 400 mil pesos. El índice de pobreza en su provincia es de 56 por ciento.

En el 2005, la marca Bentley también fue la importada por el ex diputado por Santiago, Ramón Porfirio Colón, su valor 10.5 millones, el sacrificio fiscal fue de seis millones 350 mil pesos.

Otro Santiaguero que importó un Bentley, pero el año pasado, fue el presidente de la Cámara Baja, Julio César Valentín, su costo 8.9 millones de pesos, con este el Estado dejó de recibir casi 5 millones de pesos.

En el 2007, Valentín trajo un Porsche, valorado en 3.5 millones de pesos, la exoneración del erario superó los 1.3 millones de pesos, mientras que con el Mercedes Benz que importó en el 2006 la suma sacrificada fue de 1.8 millones.

El Bentley traído por el ex diputado por Santo Domingo, Ramón Aníbal Páez, costó 8.4 millones, la pérdida fiscal fue de 3.9 millones, un poco menos que los 4.9 millones perdidos con el que trajo el ex senador por Pedernales, Ángel Dinócrate Pérez.

En el 2008, el actual senador por Pedernales, Dionis Sánchez importó un Mercedes Benz de 4.5 millones, con este se dejó de percibir 2,5 millones de pesos.

Si sumamos estas y otras exoneraciones hechas por Manuel Alberto Sánchez Carrasco, Israel Terrero Volquez y Maria Altagracia Matos, todos diputados por Pedernales en distintos periodos del 2002 a la fecha, el sacrificio fiscal fue de casi 36 millones de pesos, tomando en cuenta que Pedernales tiene un índice de pobreza de 60.5 por ciento.

Otros en la lista de los Bentley son el ex diputado por Monseñor Nouel, Luís Wellington Mejía, 5.2 millones no fueron acaparados por el Estado, en este caso, mientras que en el caso del senador por la Altagracia, Germán Castro, la suma no percibida fue de 4.6 millones. Castro además, en el 2007 importó dos Mercedes Benz, cada uno libró de impuesto 1.8 millones.

Pero es justamente el párrafo II de la ley de exoneraciones indica que: el vehículo exonerado no será transferido, sino después de un período de dos años de haber sido importado.

Hugo Rafael Núñez Almonte, diputado por La Vega importó otro Bentley, por este se de recibir 4.5 millones de pesos. Pero otros exclusivos modelos como el Roll Royce también llegaron al país apadrinados por legisladores dominicanos.

Apenas el año pasado, Agne Berenice Contreras, diputada por Elías Piña, trajo uno valorado en 8,6 millones, al ser eximido de impuestos el Estado perdió 4,8 millones de pesos, pero con la jeepeta Porsche que importó esta diputada en el 2007, la pérdida alcanzada supera los 900 mil pesos, mientras que el Mercedes Benz que trajo en el 2003, dejó de pagar de impuesto más un millón de pesos.

En Elías Piña 82 de cada 100 personas están sumidas en la pobreza.

Los diputados Rafaela Alburquerque y Juana Mercedes Vicente Moronta, de San Pedro de Macorís, José Antonio Fabián Beltré, de Monseñor Nouel, Alfonso Crisóstomo Vásquez, de Puerto Plata, Aníbal Rosario Ramírez, de Santo Domingo, Luís Ernesto Camilo García, de Duarte, Radhamés Vásquez Reyes, de San Cristóbal.

Además de Rafael Porfirio Calderón, César Augusto Díaz Filpo y Ángel José Gomera Peralta, de Azua, importaron Porsches de carrera, cada de uno de estos absueltos de pagar 1.6 millones de pesos.

El de Rudy María Méndez, diputada Barahona no pagó 2.5 millones. Mientras que el importado por Víctor Luís de Jesús Lasosé, diputado por Espaillat, libró 4.9 por pago de impuestos.

En tanto, el Porsche que trajo el diputado por San Cristóbal, Alfonso Gamaller Montás Domínguez, fue el más caro, las pérdidas al Estado alcanzaron los 7.4 millones.

Aquellos con valor CIF de más ocho millones de peso, equivalen a un valor de mercado, sin contar la ganancia del vendedor de más de 12 millones de pesos.

El presidente de la Cámara Alta, Reinaldo Pared Pérez, introdujo al país un Roll Royce, valorado en 10.7 millones de pesos, sin impuestos, el fisco dejó de percibir con este seis millones de pesos.

Minu Tavares, diputada por el Distrito Nacional importó un Ferrari, el erario dejó de percibir un poco más de dos millones de pesos, Salomón García de María Trinidad Sánchez, trajo dos Ferraris, en estos casos las pérdidas fueron de 2.5 millones y 1.7 millones respectivamente.

En cambio, el del ex senador por Monte Plata, Ramón Alburquerque, libró 2.8 millones.

Pero Celestino Peña García, representante de Santiago Rodríguez, en la Cámara Baja fue exonerado del pago de más de 3 millones de pesos en Aduanas, al igual que los Ferraris de los diputados Radhamés Castro y Lidio Cadet de Santo Domingo, Digna Reynoso del Distrito Nacional, Sergio Pascual Vargas Parra y Fausto Marino Mendoza Rodríguez, de San Cristóbal; Gilda Mercedes Moronta Guzmán, de La Vega; y José Casimiro Ramos Calderón, de Monseñor Nouel.

Sin embargo, Luís José Gonzáles Sánchez, de Bahoruco, libró el pago de 3.1 millones. Pero la exoneración del Ferrari de Karen Lisbeth Ricardo Corniel, diputada por Santo Domingo, superó los cuatro millones de pesos, lo mismo pasó con el Ferrari de Juan Benito Reyes, diputado por San Cristóbal.

El informe escrito por Participación Ciudadana también resalta que muchos de estos legisladores aspiran a ser reelectos en sus cargos o buscan una nueva posición en las próximas elecciones.

La ley de exoneraciones desde que fue concebida en 1966 ha estado sujeta a cambios por los mismos legisladores, en principio sólo se le permitía el importe de un vehículo por debajo de los 3 mil dólares, ocho años más tarde la suma limite ascendió a 5 mil dólares, para 1978 la cifra estaba en no más de seis mil dólares, precio que al llegar el año 1987 se triplicó, el tope era en ese entonces 18 mil dólares.

No fue hasta el 1996 cuando se levantó el monto límite, desde entonces los legisladores pueden importar cualquier vehículo de motor, cada dos años sin importar tipo, marca, modelo, ni costo.

Además de los mencionados en este trabajo, otros legisladores utilizaron el beneficio de la exoneración para traer vehículos aunque menos lujosos.

La información completa la pueden encontrar en la página de internet de Participación Ciudadana, www.pciudadana.com.

No hay comentarios:

Publicar un comentario